El infierno está encantador

  

 Desde el arranque, todo fue para Boca. Desde la dupla Clemente Rodriguez- Sanchez Miño, que cada vez crece más, partieeron las mejores ocasiones de gol para el xeneize, con un Independiente perdido, nervioso jugandose la continuidad de su técnico. Cristian Chávez de a poco va perfilandose en su lugar que dejó Juan Román Riquelme y junto al juvenil del que hoy habla todo el mundo Boca, S. Miño, pasa el volúmen y la elaboración de juego. Tras una pifia del central Galeano, Silva no definió del todo bien pero igual convirtió el primer tanto para los de la Ribera. Con el transcurso de los minutos el equipo de Falcioni tocaba y jugaba, desperdiciando 3 chances claras de gol en los pies de Blandi y Silva, sobrando a todo Independiente. Sin rumbo, con muchas deficiencias defensivas y poca imaginación para atacar, Independiente es Independiente y no se lo puede subestimar: Blandi perdió otra chance clara de gol y en la contra, Santana definió por el costado de un D´angelo que no promueve total seguridad y marcó el empate del rojo, en apenas su segunda llegada al arco. Parecía que el partido se emparejaba y se nivelaba, pero dos minutos después Leandro Somoza disparó un remate desde fuera del área con mucha fuerza y clavó el 2 a 1 de Boca cuando se cerraba la primera parte. Otra vez, las chances de Independiente quedaban solamente en el único jugador que desacomodó a la defensa rival: Ernesto Faría.

Apenás comenzado el segundo, el arquerito de Boca, D´angelo comete un doble gol y Paulo Rosales marca el empate para Independiente. Pocos minutos más tarde, Schavi la toca con la mano y se lleva la segunda amarilla y la expulsión, dejando a Boca con 10. En apenas unos minutos cambiaba el panorama para Boca, teniendo el rojo el momento ideal para sacar ventaja y aprovechar para llegar más tranquilo a la vuelta. Chávez se iba sustituido por el lateral derecho Albil para plantear una linea de 4 otra vez. Tras un foul al defensor uruguayo en la puerta del área, Sanchez Miño se hizo cargo de la pelota y al mejor estilo Juan Román Riquelme, la clavo por arriba de la barrera y le daba la victoria parcial al xeneize, bajo la atenta mirada del director técnico de la selección Argentina: Sabella. Más motivado, Boca seguía desperdiciando goles en los pies de sus delanteros y le dejaba al equipo de Avellaneda la posibilidad de descontar y así mantener la serie más peleada. A los 89 minutos, cuando ya se moría el partido, Clemente Rodriguez le comete un foul infantil a Leguizamón y penal para Independiente. Otra vez Farías, el que más preocupo a la defensa rival toda la noche, marcaba el empate luego de a ver patiado el penal 2 veces por invasión.